Con la intención de reiniciar las actividades económicas y de finanzas públicas, el gobierno de San Luis Potosí ya trabaja en medidas sanitarias y de escalamiento ordenado para retomar las actividades educativas, gubernamentales, sociales y recreativas.

En un documento, donde la dependencia señaló cuál ha sido la estrategia de atención financiera durante la contingencia sanitaria por el Coronavirus, expuso también los efectos generados por la contingencia sanitaria; la cual, implicó la reducción de ingresos a través del otorgamiento de estímulos fiscales, la caída en la recaudación local y la reducción de las participaciones federales por la disminución del Producto Interno Bruto.

En el mismo sentido, se destacó que la contingencia sanitaria implicó un gasto extraordinario, así como los apoyos para la reactivación económica y las ayudas sociales a la población vulnerable. Esto incluyó la implementación de un programa adicional de austeridad de la deuda bancaria y la contratación de un crédito adicional por 700 millones de pesos para financiar la emergencia sanitaria en equipamiento médico e infraestructura que apoye la reactivación económica del estado.

Del mismo modo, se habló sobre una estrategia de atención que incluye la venta del terreno adquirido para la instalación de la armadora Ford, con el fin de enajenarla en las mejores condiciones para el estado; lo cual permitiría cubrir con anticipación el 50% del crédito adquirido, mantener la capacidad financiera de atención a la contingencia sanitaria y ampliar los programas de reactivación económica.