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El consumo privado no ha logrado recuperar los niveles previos al inicio de la pandemia.

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El Indicador de Consumo Privado en el Mercado Interno correspondiente a julio, presentó un incremento anual de 11.9% (cifras originales), pero con cifras mensuales desestacionalizadas se expandió 0.1%, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Un análisis de BX+ señala que “luego de ver su mayor retroceso mensual en 13 meses (en junio), el indicador rebotó en el margen, mas sigue debajo de sus niveles pre-crisis. El repunte en contagios explicó la caída en servicios y, posiblemente, en bienes de origen importado (disrupción en cadenas globales de proveeduría), lo que opacó el alza en bienes de origen nacional.

Consideran que la tercera ola de contagios seguirá pesando en los reportes de agosto y septiembre. Sin embargo, prevén que la disminución en contagios posteriores “permitirá una recuperación, mas persisten retos, como la elevada inflación, las disrupciones en la proveeduría de mercancías y la incompleta recuperación laboral”.

En opinión de los analistas de Banco base, “las cifras de julio son señal de un estancamiento en la recuperación de la demanda interna, como consecuencia del alza en contagios que se registró a partir de julio”.

Considerando las cifras originales, el INEGI señaló que de enero a julio se acumuló un incremento de 8.4% al compararse con el mismo periodo del año 2020.

Grupo Financiero Base estima que, “durante el 2021 el crecimiento anual promedio del consumo privado será de 9.28%, luego de haber caído 11.19% en el 2020. Bajo esta expectativa, se espera que el consumo se recupere a niveles máximos (2018) en agosto del 2023”.