Durante el 2021 la industria de la construcción en su conjunto experimentó una recuperación a ritmo de 7.2%, pero su desempeño fue inferior respecto a la contracción de 2020. Sin embargo, desde finales del año pasado y los primeros meses del presente (1S22), mostró muchos signos de debilidad.
En el balance del 1S22 la edificación ha sido el segmento que ha presentado el desempeño más débil del sector, con una contracción de -1.8% a tasa anual, en tanto la construcción de obras de ingeniería civil repuntaron a un ritmo anual de 4.1% y los trabajos especializados de la construcción avanzaron un 7.7% de enero a junio, respecto a su comparativo anual.
Los analistas de Banorte coinciden en que “esto se explica en buena parte por la continuidad de proyectos prioritarios –tales como la refinería de Dos Bocas y el Tren Maya. Por el contrario, la edificación cayó por segundo mes al hilo (1.5%), afectando al total del sector. Creemos que la debilidad en el sector residencial –impactada por mayores costos– continúa arrastrando al sector, a pesar del persistente apetito por parques industriales”.
Durante junio, en particular, la industria de la construcción creció un 0.3% respecto a mayo, y en cifras originales repuntó 1.3% en términos anuales.
Finalmente, analistas de Invex apuntaron que es importante la “continua debilidad de la inversión privada en proyectos de infraestructura: Es importante la participación de la Industria Privada en proyectos que detonen productividad y crecimiento”.
La industria de la construcción creció un 0.3% en junio respecto a mayo.