El papel del diseño bioclimático en la arquitectura es fundamental para avanzar hacia la construcción sostenible, razón por la que muchas empresas han puesto en el centro de sus prioridades el contribuir al desarrollo social sin dejar de lado la sostenibilidad.
El principal enfoque de esta tendencia es diseñar edificaciones teniendo en cuenta los factores climáticos de la zona como la radiación solar, la dirección del viento, la temperatura y la precipitación para maximizar la eficiencia energética y el confort térmico.
El diseño bioclimático evoluciona a medida que la sociedad hace conciencia ambiental e incrementa la necesidad de impulsar prácticas arquitectónicas cada vez más sostenibles.
A continuación, se enlistan las tendencias según Grupo Arqual:
- Integración tecnológica. Sistemas de gestión de energía inteligente y automatización del hogar.
- Enfoque en la resiliencia climática. Se centra en que las edificaciones se adapten a las condiciones climáticas cambiantes y extremas.
- Adaptación a entornos urbanos. Abordar desafíos específicos relacionados con la urbanización, como la contaminación y la escasez de espacios verdes.
- Diseño para el bienestar. Crear entornos que promuevan el bienestar humano, como la conexión con la naturaleza, iluminación natural, etcétera.
- Colaboración interdisciplinaria: Tendencia hacia una colaboración más estrecha entre arquitectos, ingenieros, paisajistas y otros profesionales.
En un mundo que busca soluciones sostenibles y holísticas, estas tendencias representan una llamada global para destacar enfoques de diseño que no solo buscan minimizar el impacto ambiental, también impulsar la resiliencia climática, el bienestar social y la regeneración de nuestros entornos.