México necesita una inversión de más de 400 mil millones de dólares (mdd) en infraestructura para el 2032 si quiere capitalizar completamente la oportunidad que presenta la relocalización de empresas (nearshoring), según lo afirmó Rogelio Jiménez Pons, subsecretario de transporte de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
El subsecretario Jiménez Pons aseguró que ya se ha presentado un modelo de inversión mixto, aprobado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, para la construcción de algunos proyectos de transporte.
Uno de los principales retos para el nearshoring es establecer una agenda bilateral para el desarrollo de infraestructura transfronteriza, ya que los mercados del norte podrían captar el 44% de la Inversión Extranjera Directa (IED) de los próximos años.
"La nueva administración debe pelear por lograr un acuerdo para obtener condiciones especiales en los próximos 10 años, para que las gestiones de infraestructura en los pasos fronterizos se realicen en 20% del tiempo programado actual", dijo Jiménez Pons.