Al cierre del semestre, la inversión para el desarrollo de centros comerciales, naves industriales e infraestructura de servicios lideró las aportaciones al PIB del sector construcción, por arriba de la vivienda y el gasto en carreteras y puentes, según datos de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
En los primeros seis meses del año pasado, el PIB aportado por la construcción de este tipo de inmuebles alcanzó 286,642 millones de pesos, en tanto que la vivienda generó 253,072 millones y carreteras, caminos y puentes con 209,377 millones de pesos.
Por su parte, la vivienda mantiene una alza que se ve reflejada en el índice de inversión fija bruta para construcción residencial del Banco de México, que se ubicó en 97.29 puntos a septiembre de 2016, en sus niveles más altos desde inicios de 2008.
“Ha habido construcción tanto en oficinas, como en naves industriales y centros comerciales, esta parte que es netamente privada no depende tanto del gobierno, sino del crecimiento en general de la economía, ahorita lo que debemos tener en cuenta es que por el entorno de incertidumbre, los constructores se detengan un poco hasta conocer lo que sucederá con las políticas del nuevo presidente en Estados Unidos, pudiera ser que algunos proyectos nuevos se retrasen”, comentó Edmundo Gamas, director del Instituto Mexicano de Desarrollo de Infraestructura.
Según la CMIC, la inversión en este segmento tiene una tendencia alcista desde 2011 y al cierre del primer semestre de 2016 acumulaba un alza de 3.7 por ciento.
La inversión en infraestructura carretera tuvo una contracción de 10.7%, asentando así la tendencia a la baja que tiene desde 2011.