Pero a partir de este año, Invitation Homes, de Blackstone, y Starwood controlarán una cartera de 82,000 bienes inmuebles unifamiliares a lo largo de 17 mercados de Estados Unidos, en los que accionistas de la primera tendrán 59% de la fusión; mientras que el 41% restante lo tendrán accionistas de Starwood.
A principios de 2017, Blackstone lanzó Invitation Homes, que representará menos del 0.1% de las más de 90 millones de viviendas unifamiliares americanas y el 0.5% de los casi 16 millones de viviendas que se alquilan, afirma un despacho de Bloomberg.
La cartera del grupo se concentrará en viviendas de clase media y 70% de sus ingresos que proceden de Estados Unidos y Florida. La fusión permitirá ahorros al año de 50 millones de dólares, derivados de la gestión de las carteras. Blackstone, que controla 70% de Invitation Homes, tendrá 41% del grupo tras la fusión.