Desde la perspectiva del sector Real Estate, el cierre de oficinas, debido al Covid-19, ha presentado una de las mayores afectaciones a la actividad económica en la Ciudad de México y Zona Conurbada, debido al impacto que deriva en muchas otras actividades que se desarrollan alrededor de este segmento de negocio.
“Se han impactado a 10 mil 800 puntos de venta de las industrias comercial, restaurantero y hotelero, que generan 231 mil empleos formales e informales”, destacó en este sentido el Presidente de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), Enrique Téllez.
Durante un webinar en el que participaron el Presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Francisco Fernández, y el Director Ejecutivo de Banca Empresarial de Grupo Financiero Mifel, Manuel Montellano, se dieron a conocer las medidas y los impactos económicos que pueden derivarse ante un eventual nuevo cierre de actividades.
Téllez Kuenzler, por ejemplo, destacó que en los siete principales corredores de edificios de oficinas en la capital del país (Insurgentes, Perisur, Reforma, Nuevo Polanco, Polanco, Lomas Altas y Santa Fe), existen 10,600 establecimientos de preparación de alimentos y bebidas en los que trabajan 75,000 personas, las cuales se han visto afectadas en gran manera.
En su oportunidad, el representante de Canirac explicó que la industria restaurantera, que genera 2,100,000 empleos directos y 3.5 millones de empleos indirectos, “en de los directos, se ha perdido el 21% de la plantilla laboral, es decir, más de 400 mil empleos en estos meses de pandemia”.
Importancia de los espacios
De acuerdo con la ADI, hasta 2003 la industria restaurantera representaba 15% de espacio en los centros comerciales, pero actualmente supera el 30% en ese segmento.
Agregó que en los desarrollos de la ADI, los espacios comerciales sumaron 7.4 millones de metros cuadrados, en los cuales, entre abril a septiembre, cerraron 335 locales tan solo en la Ciudad de México, lo que ha provocado pérdidas por 120 millones de pesos.
“Desde entonces, los socios ADI en lo particular han mantenido negociaciones uno a uno con los locatarios para ofrecer facilidades y descuentos que les ayuden a sobrellevar esta situación”, destacó Téllez Kuenzler.
Los panelistas reconocieron que de haber un nuevo cierre de actividades, ya no se contará con liquidez para solventar esta segunda etapa de la pandemia, ya que los ahorros que tenían los empresarios ya fueron invertidos.
De presentarse esta situación, coincidieron, las autoridades deben hacer un balance entre lo sanitario y lo económico para no afectar aún más a la economía.
Finalmente, el presidente de la ADI enfatizó que la sociedad debe seguir acatando las medidas de seguridad sanitaria, como el uso de cubrebocas, gel, lavado de manos y evitar fiestas, hasta que la mayoría de las personas no estén vacunadas, pues para eso aún se podría prolongar de seis a 12 meses.
