Por primera vez, desde su instauración en 1983, el flujo de las criptomonedas podría experimentar una evolución sólida en este 2019. Y es que, la llegada de la regulación 3.0 de criptodivisas, buscará reconocer su valor como moneda de uso, ya no sólo como un simple activo digital. Esta situación abriría diversas oportunidades para la industria, principalmente en el sector inmobiliario, donde ya se está experimentando este modelo de transacción para el fondeo de nuevos desarrollos en México, desde cualquier parte del mundo.
Cabe destacar que en el mercado existen más de mil 500 monedas digitales, cada una con su cotización, misma que varía dependiendo de la oferta y la demanda, y, aunque nacieron como una forma de pago, se han convertido también en una manera de invertir; una de ellas, el mercado de bienes raíces a través de los tokens o certificados respaldados por activos inmobiliarios. Hace unos días, David Castillo, fundador y CEO de la empresa Uxlon (pionera en transacciones con blockchain y servicios de tecnología emergente), manifestó en una entrevista que el blockchain permite a los inversionistas brindar confianza a los usuarios; quienes, a su vez, pueden invertir en proyectos a partir de modelos de fondeo conocidos como crowdfunding, a partir de un token.
“A través de tokens o monedas se permite a personas de cualquier parte del mundo invertir en desarrollos inmobiliarios en México. Se crea una criptomoneda equivalente al propiedad o proyecto inmobiliario que se quiera hacer”, comentó, al momento de reconocer la necesidad de una nueva regulación para estas transacciones electrónicas; con la intención de fortalecer la transparencia y trazabilidad de proyectos en la industria inmobiliaria.
Cabe señalar que el año pasado, el gremio inmobiliario reportó un declive en proyectos de blockchain; sin embargo, no significó que estuvieran muriendo este tipo de negociaciones digitales, sino que hubo mejoras en su regulación para abrir el mercado a nuevos jugadores mucho más capacitados en la materia.