Homex, al igual que Geo y Urbi, han visto golpeados sus resultados en los últimos dos años por sobreinvertir en grandes desarrollos y tierras fuera de las zonas urbanas donde los mexicanos ya no quieren vivir.
Agregó que sus ventas se derrumbaron y se deterioró su liquidez por el cambio en la demanda y las nuevas políticas gubernamentales de apoyo a la tendencia, obligándolas a negociar con acreedores el refinanciamiento de sus pasivos.
Las acciones de las desarrolladoras han sido fuertemente castigadas, aunque operadores esperan que los papeles estarían recortando sus fuertes pérdidas del año por expectativas de que logren un acuerdo con sus acreedores para reestructurar sus pasivos.