Para recuperar la viabilidad financiera y los empleos perdidos, la Oficina de Visitantes y Convenciones (OVC) de la Riviera Nayarit y la Asociación de Hoteles y Moteles de Bahía de Banderas solicitan al gobierno estatal subir la ocupación de los hoteles al 50% y no al 30%, mientras Nayarit esté en color naranja del Semáforo epidemiológico por COVID-19.
Richard Zarkin, gerente de relaciones públicas de la OVC del destino, explicó que los hoteles de la zona cuentan con el suficiente espacio para respetar la sana distancia en los lugares comunes, como lobbys, restaurantes, gimnasios y albercas. Mencionó que un hotel con una ocupación máxima de 30% no es rentable.
Y destacó que los inmuebles y Riviera Nayarit fueron de los primeros en obtener el sello Viaje Seguro del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), por lo que está comprobado que pueden recibir a viajeros cuidando su salud con protocolos adecuados; y al aumentar la capacidad, también crecería el empleo en la zona.
Referente a la conectividad aérea a la riviera, Zarkin comentó que ha empezado a recuperarse desde diversas ciudades de Estados Unidos, mientras que el turismo carretero en México ha ido aumentando. Y subrayó que la oficina continúa en conversaciones con las aerolíneas sudamericanas y europeas para que una vez que se abran las fronteras, pueda recibir los vuelos que se tenían antes de la pandemia.
El directivo señaló que pese a la reducción en el flujo de viajeros, se espera no reducir tarifas, ya que esto perjudicaría la rentabilidad de las empresas, mientras que para retomar los precios se tardarían varios años, publicó Milenio.