A mayo de este año, el saldo de la cartera crediticia a las grandes empresas sumó 1.8 billones de pesos, una caída de 21.7% en términos reales contra el mismo mes del 2020.
Datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) indican que esta es la segunda mayor caída desde que se tiene registro, solo superada por la contracción de 23.4% de abril.
Por otra parte, el saldo de los créditos a las Pequeñas y medianas empresas (Pymes) cayó un 12.1% anual real, al totalizar en unos de 370 mil 854 millones de pesos en el quinto mes.
El crédito total a empresas disminuyó un 19.4%, más que el 10% del crédito al consumo, y que el descenso de un 12.4% del financiamiento total de la banca.
Especialistas señalaron que las grandes empresas son especialmente sensibles a los riesgos sistémicos debido a que su operación tiene mayor exposición a variables macroeconómicas como el flujo de inversión extranjera o el tipo de cambio.
También destacaron los retrocesos en la cartera comercial a entidades financieras y una menor originación en la cartera comercial de los grandes bancos, de acuerdo con una publicación de El Financiero.