El Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) refiere que cuando una persona comienzas a trabajar en un empleo formal, el patrón tiene la obligación de depositar de manera bimestral en una cuenta el equivalente al 5% del salario integrado.
Lo que incluye el sueldo más prestaciones, así como cuotas diarias, gratificaciones, percepciones, gastos para alimentación y otros conceptos establecidos en tu contrato laboral. Ese dinero es la Subcuenta de vivienda y es administrada por el Infonavit.
“Es una de las principales herramientas que tienes disponibles para generar ahorro, un patrimonio y para tener certeza de tu futuro financiero”, menciona el instituto en un comunicado. Entonces, ¿para qué sirve la Subcuenta de vivienda?
Este ahorro tiene distintos usos, el principal es que ayuda a formar un patrimonio. Cuando el trabajador solicita un crédito al Infonavit y se autoriza, además del préstamo, obtiene el total del ahorro acumulado, como complemento al préstamo.
Además, durante el tiempo que el ahorro en la subcuenta es administrado por el Infonavit, genera rendimientos que por ley deben ser superiores o iguales a la inflación. Otra de las ventajas es que, si durante la vida laboral no tramitaste ningún crédito puede usar ese dinero como complemento a la jubilación.
“De esta forma, la subcuenta es una de las principales herramientas de ahorro en México, considerando que la mayoría de las personas no cuentan con planes de ahorro, registro de sus gastos o no tienen recursos suficientes que les permitan enfrentar eventualidades o asegurar fondos para su retiro”.
Por medio de la subcuenta, más de 70 millones de derechohabientes registrados ante el Infonavit tienen un ahorro al que acceden. Para conocer el saldo de ahorro, es necesario entrar a micuenta.infonavit.org.mx, si el trabajador aún no la tienes debe registrarse en la misma página.
Usos de la Subcuenta de vivienda:
-Comprar una vivienda nueva o usada
-Construir una vivienda en terreno propio
-Ampliar o mejorar la casa actual
-Pagar la hipoteca de la casa en otra institución financiera y utilizarla como garantía.