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La cartera de crédito de la banca a la vivienda (crédito hipotecario) reportó en abril un crecimiento de 3.4% real respecto al mismo mes del año pasado.

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Es el segundo mes consecutivo que se sostiene dicha tasa de crecimiento, impulsada fundamentalmente por el crédito a la vivienda media y residencial, de acuerdo con cifras del Banco de México (Banxico). El ritmo de crecimiento real, de alguna manera se ha contenido por el repunte de la inflación.

 

De acuerdo con un análisis de Intercam, considerando cifras nominales, “los créditos a la vivienda representan el 22.4% de la cartera vigente y avanzaron +11.4% en abril de 2022. Los créditos residenciales subieron +12.3% gracias a la fuerte demanda de hogares, las facilidades de financiamiento vía hipotecas y el exceso de oferta de inmuebles en el país. Este mes (abril) se colocaron $9 mil mdp en préstamos residenciales”.

 

Si lo vemos en términos reales, la cartera de crédito a la vivienda de interés sociales disminuyó -11.9% en el cuarto mes del año, respecto al mismo reporte del año anterior; por su parte, la cartera de la vivienda media y residencial repuntó 4.3% anual en abril.

 

 

De acuerdo con Banxico, el saldo de la cartera de crédito a la vivienda se ubicó en un billón 117 mil millones de pesos al cierre del cuarto mes del año 2022.

 

En Banorte afirma estar “atentos al comportamiento de compra y financiamiento de los hogares, considerando que una pérdida del poder adquisitivo –causada por el nivel de inflación actual– puede provocar que los hogares posterguen o eliminen los gastos no esenciales y/o busquen financiar su gasto corriente con crédito”.

 

Intercam considera que “en el mediano plazo, el crecimiento de la cartera se normalizará por los mayores costos financieros y los aumentos en el precio de la vivienda, haciendo las hipotecas menos accesibles. Mientras tanto, el sector de viviendas mantiene buen ímpetu y alta demanda.