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El portafolio hipotecario de la banca mostró signos de recuperación al cierre de 2024 y, al inicio de 2025 mantiene una tendencia positiva, a pesar de que el primer semestre suele ser un periodo de menor dinamismo en la colocación de créditos para vivienda.

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De acuerdo con los Agregados Monetarios y Actividad Financiera publicados por el Banco de México (Banxico), el saldo del crédito hipotecario otorgado por la banca alcanzó en enero de 2025 un billón 418 mil 700 millones de pesos, lo que representa el 20.7% del saldo total de la cartera de crédito al sector privado.

 

Significó este desempeño un crecimiento real anual del 3.5% en la cartera hipotecaria de la banca, superando el repunte del 3.0% con el que cerró 2024. El avance se explica, en gran parte, por el crecimiento del 3.7% anual en el crédito destinado a vivienda media y residencial.

 

En contraste, la cartera de vivienda de interés social mostró una desaceleración en su caída: En enero de 2025 aún registró una contracción del -1.2% anual, pero significativamente menor al ajuste de -6.7% observado en diciembre de 2024.

 

 

Un factor relevante es que el índice de cartera vencida de la banca se mantiene en niveles bajos, ubicándose en 2.8% al cierre de enero de 2025, prácticamente sin cambios respecto al 2.6% reportado en el mismo mes del año anterior. Esto refleja que el portafolio hipotecario de la banca sigue siendo sólido y con una morosidad controlada.

 

Para los próximos meses, la evolución del crédito hipotecario dependerá de la estabilidad económica y del comportamiento de las tasas de interés. Actualmente, el costo promedio del financiamiento hipotecario se mantiene en torno al 10.3%, nivel que ha prevalecido desde septiembre de 2023. Esta estabilidad ha permitido un repunte en la colocación de créditos, especialmente en el último trimestre de 2024, a pesar de las presiones al alza en el costo del dinero a largo plazo durante todo el año pasado.

 

La perspectiva para 2025 sigue siendo favorable. Con la inflación bajo control y la reciente reducción en la tasa de referencia por parte de Banxico, es previsible que las tasas hipotecarias se mantengan estables e incluso podrían registrar ligeras reducciones. En caso de que esto ocurra, la colocación de crédito hipotecario podría fortalecerse aún más, favoreciendo el acceso a la vivienda y el dinamismo del sector inmobiliario en México.