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El 13 de agosto se dio a conocer que Fundación Slim llegó a un acuerdo con AstraZeneca y la Universidad de Oxford, para que Latinoamérica tenga acceso a la vacuna contra el virus.

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La farmacéutica mexicana Liomont envasará 685 mil dosis diarias de la vacuna anti COVID-19 desde su planta de Ocoyoacac, Estado de México. De las 250 millones de dosis que se contemplan para el 2021, se prevé una producción mensual de 20.8 millones.

Alicia Galván, directora médica de Laboratorios Liomont, mencionó que “esta planta la habíamos diseñado para la vacuna de influenza como para nuestros productos inyectables normales, sin embargo, ya se tomó la decisión que de ser positivo el estudio clínico, todo el 2021 la planta estará dedicada a la fabricación de la vacuna del coronavirus”.

Mientras que Sergio Valentinotti, director de ciencias de la vida de la empresa, refirió en conferencia de prensa que la planta biotecnológica cuenta con la tecnología de poder fabricar desde México la vacuna; sin embargo, su capacidad ronda la mitad de la de Argentina.

Al momento, los representantes de Liomont no saben cuántas de las 250 millones de vacunas del 2021 se destinarán al territorio mexicano, pues todo depende de cuántos países se sumen y de la aprobación de la vacuna por parte de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) de Estados Unidos, que se espera en noviembre.

En tanto, la Comisión Europea firmó un contrato a nombre de los estados de la Unión Europea con el laboratorio británico AstraZeneca para el suministro de al menos 300 millones de dosis de esta vacuna. El contrato contempla la opción de comprar 100 millones de dosis adicionales para su distribución entre la población de los 27 estados miembros del bloque, mencionó Reuters.

El 13 de agosto se dio a conocer que Fundación Slim llegó a un acuerdo con AstraZeneca y la Universidad de Oxford para que Latinoamérica tenga acceso a la vacuna contra el virus; la fabricación de dosis se hará en la planta mAbxience de Grupo Insud, en Argentina, mientras que el envasado y exportación se realizará desde México.

El acuerdo consiste en que el riesgo de inversión por la investigación lo realiza la farmacéutica y la universidad, en tanto que la fundación junto con los gobiernos que se sumen, correrá con los gastos en riesgos de producción.

El gobierno mexicano estará invirtiendo alrededor de 25 mil millones de pesos. Es posible que Panamá, Colombia, Ecuador, entre otros, soliciten dosis.