El financiamiento es un pilar fundamental para el desarrollo del sector manufacturero, especialmente en un entorno globalizado donde la competitividad y la innovación son clave.
La industria manufacturera mexicana es un componente clave en el crecimiento económico del país, atrayendo $16,653 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa (IED) durante la primera mitad de este año, según la Secretaría de Economía. Estados como Ciudad de México, Nuevo León, Baja California, Estado de México y Guanajuato concentraron el 68% de esta inversión, con capital proveniente principalmente de Estados Unidos, Alemania y Japón.
Para mantenerse competitivas en el mercado global, las empresas manufactureras requieren financiamiento que les permita modernizar sus plantas, integrar tecnología avanzada y aumentar su capacidad productiva. Esto es esencial no solo para mejorar su competitividad, sino también para responder a las exigencias del comercio internacional, según Paulina Aguilar, cofundadora y Chief Revenue Officer (CRO) de Mundi.
Datos del INEGI revelan que entidades como Coahuila, Nuevo León, Jalisco, Guanajuato y el Estado de México encabezan la producción manufacturera en el país. Sin embargo, estados como Sonora, Oaxaca, San Luis Potosí, Morelos y Querétaro han mostrado un crecimiento notable en su actividad industrial en los últimos meses, lo que refleja una reconfiguración en las dinámicas productivas a nivel nacional.
Enfrentar los retos del futuro requiere que las empresas manufactureras adopten tecnologías emergentes como la automatización y la digitalización. Para ello, necesitan financiamiento que les permita implementar estas innovaciones y mantenerse competitivas en un mercado global en constante cambio. Compañías FinTech, como Mundi, junto con el apoyo del gobierno y las instituciones financieras tradicionales, juegan un papel esencial al proporcionar soluciones de financiamiento adaptadas a las necesidades del sector manufacturero.