El nuevo trazo del Tren Maya afectaría ríos subterráneos, cuevas y cenotes, ya que proyecta pasar por encima de ellos, en la zona que va de Playa del Carmen a Tulum, en Quintana Roo, denuncian diferentes organizaciones civiles de la entidad.
El cambio consiste en que el Tramo 5 Sur ya no irá por un paso elevado que se construía sobre la carretera federal 307 Playa del Carmen-Tulum, pues pasará a ras de tierra por la zona selvática que corre en paralelo a esa vía federal.
Para resolver las superficies frágiles de roca caliza donde se prevé la existencia de cavernas y oquedades, se proyectan tres tipos de estructura diferentes para que el tren pase por arriba: una losa pilotada ferroviaria, un tablero de vigas prefabricadas y un tablero metálico.
En este sentido, para cualquiera de las tres opciones, se proyectaría la introducción de enormes pilotes de acero y concreto que den estabilidad al tren en esas zonas frágiles de cuevas y cenotes, según una publicación de Animal Político; lo que afectaría a un ecosistema milenario y a la economía de la región.
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) no ha anunciado oficialmente cuál será el nuevo trazo, y tampoco ha explicado cuáles serán los impactos ambientales de la nueva ruta, luego de que para el tramo cancelado de la carretera federal tuvieron que remover y replantar más de 20 mil árboles.
Javier May, titular de Fonatur, aseguró que la modificación del trazo es la mejor decisión, ya que no afectará a la actividad económica de la región y se cumplirá con la fecha fijada para que el tren inicie operaciones, aunque las organizaciones mencionan lo contrario.