El Sistema de Transporte Colectivo Metrorrey tiene fuera de circulación el 28% de la flotilla de vagones, de 134, en sus tres líneas, incluyendo las unidades remanufacturadas recientemente adquiridas.
De las unidades sin usar, 15 corresponden a las alemanas remanufacturadas, 13 son de los primeros vagones adquiridos marca Bombardier.
Cinco más son de la misma marca francesa, aunque en un modelo más reciente y los últimos cinco son de la marca CAF, para dar un total de 38.
En el diagnóstico complementario de movilidad sostenible, en el apartado de la Red Maestra de Metrorrey, se detalla, que los problemas en algunas unidades se deben a la falta de refacciones por presupuesto.
Y de acuerdo con el documento publicado en el Periódico Oficial del Estado, esta situación resulta “en una limitación para ofrecer una mejor oferta de transporte”.
Añade que “pese al histórico avance de la Línea 3, debido a la ausencia de un programa de adquisición de refacciones con presupuesto, la flota de trenes del Metro presenta problemas de fiabilidad”.
La cantidad de vagones sin operar puede ser mayor, pues nueve de las unidades remanufacturadas restantes no pueden ser utilizadas en hora pico, porque presentan fallas y son usadas ocasionalmente en horas no pico.
De acuerdo con una publicación de EL NORTE, en el informe, el Estado admitió que cuenta con un servicio deficiente en la infraestructura del metro, destacando los torniquetes y las máquinas de boletos.