A fin de medir las distintas características de cada distrito en Perú para poder evaluar la estrategia de inversión, promoción para el desarrollo inmobiliario y cuánto puede llegar a revalorarse el precio por metro cuadrado, una consultora inmobiliaria desarrolló una herramienta de ‘place branding’ o marca ciudad.
Fernando Velarde, gerente general de VeMás, dijo que el objetivo no es evaluar qué distrito es mejor o peor, que se trata de un ejercicio que puede determinar que existen distritos y zonas con mucho potencial y poco aprovechados.
Y aunque es más fácil posicionar la marca ciudad de distritos consolidados, o de los más céntricos y tradicionales, el especialista señaló que también “existen otras motivaciones que brindan la posibilidad de trabajar una marca para distritos o zonas poco consolidados o no tradicionales”.
En ese sentido, en VeMás consideraron que distritos como La Victoria, Cercado, Pueblo Libre, San Luis, Rímac, Bellavista, La Perla, La Punta, Surco y Chorrillos tienen mucho potencial de marca ciudad, según mencionó Velarde a Perú21.
La consultora inmobiliaria también detectó otros sectores como Ventanilla, Villa El Salvador, Jicamarca, entre otros más, a los que a pesar de faltarles mucha infraestructura, tienen identidad, actividades estructurantes importantes, demanda de vivienda y más características que los pueden volver atractivos.
“El problema con estos distritos es que requiere de mucha mayor inversión del Estado que del privado para gestionar la viabilidad legal así como de habilitaciones necesarias para la inversión privada”, afirmó Velarde.
De acuerdo con la investigación realizada por VeMás para evaluar cuáles son las distintas características medibles de una marca ciudad para trasladarlo a distritos y ciudades que ya se encuentran reconocidas por las personas, La Victoria se convirtió en un claro ejemplo de ello.
En La Victoria, los desarrolladores inmobiliarios se asociaron para invertir en regenerar una porción de la ciudad, crear marketing alrededor del distrito y así, la municipalidad local y los desarrolladores privados impulsaron las ventas y el valor de este distrito.
“Nos queda claro que para potenciar una marca ciudad debe existir una colaboración pública y privada, además, debe hacerse en función a estudios y planes que puedan medir los resultados en el tiempo, para ajustar las normas e inversiones según vaya avanzando el proceso de regeneración urbana”, aseguró el especialista.