El mercado de alquiler vacacional en Europa está viviendo una transformación importante. Aunque antes de la pandemia la mayoría de los países aplicaban límites de 90 o 120 días al año para rentas de corta duración, hoy las reglas se han vuelto mucho más complejas y estrictas.
¿Por qué importan estas reglas?
Para quienes buscan comprar una segunda vivienda con la idea de rentarla en plataformas como Airbnb, las regulaciones locales se han convertido en un factor clave a considerar, junto con el precio de la propiedad, la accesibilidad y el flujo de turistas. Estas limitaciones pueden afectar directamente la rentabilidad esperada de una inversión inmobiliaria.
¿Cómo varían las reglas?
Las restricciones no son iguales en todas partes, indicaron los analistas. Algunas ciudades han tomado medidas muy severas. Por ejemplo, Barcelona planea prohibir totalmente los alquileres turísticos a partir de 2029, y ya se observa una disminución en el número de propiedades disponibles en plataformas de renta vacacional.
Además, no solo las grandes ciudades están actuando. En zonas rurales, como en algunas aldeas de Provenza (Francia), se han impuesto límites al número de casas que se pueden rentar a turistas, y las listas de espera para obtener un permiso se actualizan cada dos años.
En lugares como Chamonix (Francia), cada propietario solo puede registrar una propiedad para alquiler vacacional, y debe renovar su autorización cada tres años.
¿Qué hacer si quieres rentar?
Recomendaciones para propietarios
Si estás considerando alquilar tu propiedad en Europa, ten en cuenta lo siguiente:
Infórmate: Consulta las regulaciones locales y nacionales antes de listar tu propiedad.
Registra tu propiedad: Cumple con los requisitos de registro y obtén los números de licencia necesarios.
Cumple con las normativas fiscales: Asegúrate de declarar correctamente tus ingresos y aprovechar las deducciones disponibles.
Considera la eficiencia energética: Realiza las mejoras necesarias para cumplir con las calificaciones energéticas requeridas.