El mercado de viviendas nuevas en Estados Unidos cerró julio de 2025 con un desempeño estable, aunque con señales mixtas que reflejan el entorno económico actual. De acuerdo con el informe mensual de Zonda, las ventas se mantuvieron prácticamente sin cambios frente a junio, con 668,318 unidades vendidas a una tasa anualizada ajustada por estacionalidad, lo que representa una caída del 6% respecto al mismo mes de 2024.
Incentivos y descuentos ante mayor inventario
Para mover este inventario, 77% de las comunidades ofrecen incentivos en viviendas listas para entrega, mientras que 58% hacen lo mismo en propiedades aún en construcción. Estas promociones incluyen reducciones de precio, financiamiento preferencial y beneficios adicionales para los compradores.
Precios: Contrastes según el segmento
También, el comportamiento de los precios mostró contrastes. Mientras las viviendas de nivel básico bajaron 1.1% interanual hasta un precio promedio de $325,690, los segmentos más altos rompieron la tendencia a la baja que traían desde enero:
- Viviendas de nivel medio subieron 0.4% a $518,194.
- Viviendas de alta gama repuntaron 2.6% hasta $923,048.
Este aumento responde, en parte, a la apertura de nuevas comunidades con precios más altos debido al encarecimiento del suelo y los costos de construcción.
Diferencias regionales
Subraya el reporte que no todos los mercados se comportan igual. Ciudades como Orlando (+16.8%), Charlotte (+14.8%) y Raleigh (+13.5%) registraron un fuerte crecimiento en el número de comunidades activas, mientras que Filadelfia (-16.3%), Minneapolis (-11.0%) y Nueva York (-9.0%) tuvieron caídas significativas.
Un mercado más complejo de leer
Para Ali Wolf, economista en jefe de Zonda y NewHomeSource, el mensaje es claro: “Las generalizaciones no sirven. Un mercado débil como Austin no se puede comparar con la estabilidad de Dallas. Hoy más que nunca, entender las particularidades locales es la clave”.
Concluye el documento que el mercado de viviendas nuevas en EE.UU. se encuentra en un punto de equilibrio: Las ventas no retroceden, pero tampoco crecen, los precios muestran señales mixtas y los constructores dependen de incentivos para mover inventarios crecientes. El segundo semestre será crucial para saber si la demanda logra absorber la mayor oferta y si el mercado puede recuperar un ritmo más dinámico.