El Centro Histórico de la ciudad de Puebla, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1987, sigue siendo un referente nacional por su belleza arquitectónica, riqueza cultural y dinamismo urbano. Para conservar su esplendor y garantizar su funcionalidad, el Ayuntamiento capitalino ha intensificado las labores de vigilancia, mantenimiento y atención inmediata a problemáticas que puedan afectar esta importante zona.
Gracias a este monitoreo constante, en lo que va del periodo actual se han canalizado 345 reportes oficiales a distintas áreas del Ayuntamiento, incluyendo las secretarías de Movilidad e Infraestructura, Servicios Públicos, Seguridad Ciudadana, entre otras. Estos reportes han permitido atender con mayor rapidez asuntos como baches, luminarias apagadas, señalización dañada, mobiliario urbano en mal estado, limpieza de calles y banquetas, y otras necesidades del entorno urbano.
La labor interinstitucional facilita una respuesta más ágil y coordinada, contribuyendo no solo a la preservación del patrimonio histórico, sino también al orden, la movilidad segura y la experiencia de quienes viven, trabajan o visitan el Centro.
Puebla reafirma así su compromiso con la historia y el futuro, protegiendo uno de sus espacios más representativos y fortaleciendo su vocación turística, cultural y urbana.