México se ha caracterizado por ser muy productivo y competitivo en diversos sectores manufactureros desde que inició el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Algunos ejemplos son las divisiones automotriz y de autopartes, que son pilares en la exportación nacional, asimismo la industria aeronáutica, que en años más recientes ha tenido un gran impulso aunque aún no se ensambla un avión completo.
Sin embargo, con el fenómeno del nearshoring vinculado a la evolución del T-MEC se abren una serie de posibilidades para diversas actividades productivas que actualmente no son explotadas en el país. Además, la relocalización de empresas genera oportunidades de fortalecer algunas labores ya presentes pero que tienen un gran potencial de expansión y serán las más favorecidas.
Diversos expertos consultados por Real Estate Market & Lifestyle han expresado sus puntos de vista sobre las oportunidades que tiene México de impulsar labores productivas que hoy no son importantes en México y que gracias al nearshoring se presentan circunstancias para diversificar más la actividad industrial del país.
SECTORES ESTRATÉGICOS, EL MÉDICO, UNO DE ELLOS
Gonzalo Robina, director general adjunto de Fibra Uno (FUNO), manifestó que la crisis sanitaria evidenció la necesidad de atender sectores estratégicos para la región de América del Norte, por ejemplo: el sector de la salud, agregó: “En particular el sector hospitalario para México”.
Con cierta coincidencia, Vladimir de la Mora, presidente de la American Chamber of Commerce of México (AMCHAM) afirmó que el sector salud tiene una gran ventaja, porque la pandemia nos demostró que en esas circunstancias necesitamos tener todos los suministros y el equipo accesibles en caso de una emergencia. “Entonces, creo que aquí muchas de las empresas del sector médico van a voltear a ver a México como una gran oportunidad para establecerse dentro del país”.
También Luis de la Calle, director general y socio fundador de De la Calle, Madrazo, Mancera, (CMM), concuerda en que hay una enorme capacidad de crecimiento en toda la industria médica, desde el desarrollo farmacéutico, biología molecular, análisis clínicos para las pruebas para los futuros medicamentos, hasta el turismo médico. Desde su punto de vista, tenemos ventajas importantes.
SECTOR ELÉCTRICO Y DE TECNOLOGÍA
En su participación en Norte Económico, de Banorte, el presidente de AMCHAM agregó que México ya juega un papel significativo en un sector eléctrico, pero con la llegada de los autos eléctricos hay que crear ahora sus componentes, por lo que hay una gran oportunidad, solo que, puntualizó, “que las empresas deben trabajar con su talento para generar las nuevas habilidad que se van a requerir”.
Otros especialistas consideran que México está preparado para impulsar el desarrollo de alta tecnología, cuya evolución en el país ha venido de la mano –en poco más de tres décadas– de los sectores aeronáutico y aeropartes, automotriz y autopartes, electrónica, eléctrica, nanotecnología, mecatrónica e incluso en los servicios de telecomunicación.
No debemos perder de vista algunas políticas públicas de Estados Unidos que están fortaleciendo la posición de México frente China, como la Ley conocida como The Chips and Science Act, que limita a China el acceso a microchips de alta gama y a partir de entonces se promueven esas inversiones en América del Norte; algunas de ellas podrían aterrizar en México.
Al respecto, Vladimir de la Mora expresó que “México ha demostrado que tiene capacidad para ser un gran país de manufactura, pero también ha confirmado tener una gran capacidad, de sus ingenieros, para poder desarrollar tecnología”.
Declaró que lo hemos visto en diversos sectores como el automotriz y aeroespacial, en algunas de ellas con grandes centros de ingeniería en México. “Creo que aquí es una gran oportunidad, el poder traer no solamente la inversión en manufacturas, sino también poder traer inversiones en desarrollo de tecnología. México es un país que respeta la parte de las tecnologías, hay compañías que se la piensan mucho en llevar desarrollo de tecnología a otros países, por protección de su capital intelectual, y México ha demostrado que la puede mantener. Entonces, yo creo que ahí es otra oportunidad, tenemos que buscarla”.
México es una de los naciones que más ingenieros genera en toda América Latina, pero una vez más, las empresas tienen esa responsabilidad de invertir en el talento joven, darle oportunidades dentro de nuestras empresas para poder desarrollar el talento, apuntó el representante de la AMCHAM.
SECTOR AGROALIMENTARIO Y VINCUALDOS AL GAS
Luis de la Calle asevera que el país podría alcanzar un máximo nivel de desarrollo a partir de la industria agroalimentaria –que ya representa el 25% del mercado de Estados Unidos–, la manufactura médica, con farmacéuticos, biología molecular, pruebas para medicamentos e incluso maquinaria especializada y herramientas de uso cotidiano, además ser parte del frente que compita por el liderazgo de la industria automotriz con la llegada de los autos eléctricos.
A la vez, como parte de Norte Económico, de Banorte, De la Mora, consultor y especialista en comercio exterior, afirmó que México está ante la gran oportunidad de desarrollar “aceros especializados, que son intensivos en gas, vidrio, fibra de vidrio, todos los plásticos, las resinas, la fibra sintética, que son los que te permiten incrementar el valor agregado por línea producida”.
Por lo tanto, aseguró que uno de los primeros retos que tiene América del Norte es el aprovechamiento del gas natural a través del desarrollo de la industria petroquímica, del acero, del vidrio y de todos sus derivados, y de las fibras sintéticas para incorporar más valor agregado por línea exportada. “Pero en la medida en la que no tengamos un mercado de energía integrado en América del Norte, no vamos a poder aprovechar esa oportunidad”, apuntó.
En opinión de Luis de la Calle, además de la energía, los sectores que van a tener un mayor incremento serán: “en primera, toda la parte agroalimentaria, ahí no tenemos competencia con Asia, porque América del Norte es proveedor de Asia, ahí más bien los flujos van a ser en el sentido inverso; [por lo tanto] la transformación del campo mexicano es no solamente para la producción de bienes primarios, sino para la manufactura de preparaciones alimenticias, ahí es donde está el crecimiento más importante”, afirmó.
SEMICONDUCTORES Y BATERÍAS DE LITIO
Kennet Smith Ramos, ex jefe de las negociaciones técnicas para el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), señaló que algunas de las áreas más beneficiadas en México por este fenómeno han sido el automotriz y aeroespacial, así como el agropecuario y agroindustrial.
También en su participación en el podcast Norte Económico, del Grupo Financiero Banorte, De la Mora consideró que se requiere que la liberalización comercial y el aprovechamiento del T-MEC “vaya de la mano con políticas públicas domésticas, una política industrial basada en presupuesto y apoyo a todos estos sectores que queremos desarrollar: semiconductores, baterías de litio, equipo médico de alta tecnología, para volvernos una región de verdad atractiva a estos sectores del futuro. Yo creo que es la tarea hacia los próximos años”.
Para finalizar, agregó que es muy importante darnos cuenta de la posibilidad y el potencial que tiene México de atraer inversión de China en procesos de alta tecnología, porque también produce bienes de capital y bienes manufacturados con tecnología avanzada.
Texto: Real Estate Market & Lifestyle
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