Además, tenemos una clase media creciente, somos un país especializado que sabe competir con el mundo, con una gran interrelación comercial con Estados Unidos, que nos pone en una situación muy diferente a lo que éramos antes, con una capacidad competitiva a nivel mundial.

México se ha convertido en un actor relevante en la economía global. La nación ha construido una infraestructura robusta, con tratados de libre comercio con varias decenas de naciones, lo que amplía su capacidad exportadora y genera nuevas oportunidades.

Hemos vivido una etapa de estabilidad financiera y estabilidad económica, y contamos con un sistema financiero sólido, con una banca competitiva con crédito disponible que nos coloca en un momento significativo.

El país se presenta como un excelente lugar para invertir, atrayendo a empresas de todo el mundo gracias a su ubicación geográfica, contexto geopolítico favorable y una población joven y educada. Bajo el nuevo gobierno, la estabilidad y las oportunidades para los inversionistas se fortalecen.

Particularmente, HSBC, a través de su programa "Welcome to Mexico", apoya a empresas internacionales a establecerse en México, ofreciendo financiamiento y servicios esenciales. Además, apoya a las empresas mexicanas que operan en otras partes del mundo.

Cuenta el país con infraestructura significativa en sectores como agricultura, ganadería y turismo, lo que subraya su potencial económico.

Los inversionistas extranjeros que operan en México valoran sus fortalezas y oportunidades, haciendo de México un destino atractivo a nivel global.