El bambú es un recurso natural con un gran potencial para la construcción de viviendas, y aunque su uso no es tan extendido como otros materiales, ofrece importantes ventajas que lo convierten en una alternativa sustentable y eficiente.
Así lo afirmó Verónica Correa Giraldo, CEO de Bambuterra, durante el 39 aniversario del sismo de 1985 y el 7º del sismo de 2017 en la Ciudad de México, al destacar los beneficios del bambú en el diseño y construcción de viviendas.
Sin embargo, el bambú ha demostrado ser una excelente opción para construir viviendas seguras y sostenibles. En países como Colombia, Ecuador, Costa Rica y Filipinas, se han desarrollado políticas y proyectos que promueven su uso. En Colombia, por ejemplo, existen pueblos enteros construidos con guadua, un tipo de bambú, que han resistido el paso del tiempo, manteniéndose en pie por más de 150 años.
Una de las principales ventajas del bambú es su bajo impacto ambiental. Una hectárea de bambú es capaz de capturar tanto CO2 como la producción de 18 toneladas de cemento al año, lo que lo convierte en un aliado en la lucha contra el cambio climático. Además, este material es renovable, y con el manejo adecuado, una hectárea puede producir hasta 1,000 m² de material de construcción sostenible.
Además, la empresa está trabajando en conjunto con diversas instituciones para desarrollar una norma mexicana que regule el uso del bambú en la construcción, lo que permitirá estandarizar su aplicación y garantizar la seguridad y durabilidad de las construcciones.
Por último, se destaca que el bambú se presenta como una solución viable para la construcción de viviendas sustentables en México y el mundo. Con sus beneficios ambientales, sociales y económicos, este material tiene el potencial de transformar la manera en que construimos, especialmente en comunidades que dependen de la autoconstrucción.