En las principales urbes, el crédito puente ha sido un instrumento cada vez más socorrido por los desarrolladores inmobiliarios de vivienda media y residencial, que buscan contar con un financiamiento que les permita impulsar sus proyectos mediante ministraciones, reduciendo sus riesgos de endeudamiento y contar con el capital necesario para cada etapa de la obra.
Hasta ahora, esto ha sido un común denominador para proyectos de vivienda, pero el exponencial crecimiento de los destinos de playa mexicanos, impulsados principalmente por un ajuste en el mercado causado por la pandemia que movió a más familias a adquirir una propiedad fuera de las grandes urbes y una mayor demanda turística de los destinos de playa del país, está abriendo nuevas plazas para los desarrolladores inmobiliarios.
Impulsado por estas tendencias, la Sofom Serfimex Capital abre para sus desarrolladores un nuevo nicho de financiamiento en playa, sin dejar de atender a la vivienda residencial, pero evolucionando a los créditos que el mercado necesita. En este sentido, estima cerrar el 2022 con un crecimiento en el otorgamiento de créditos puente de alrededor del 300% respecto a lo otorgado en 2021, considerando los nuevos desarrollos de playa en destinos como Mazatlán, Los Cabos, Tulum entre otros.
Actualmente la Sofom cuenta con líneas de financiamiento que le permiten no limitarse a proyectos de vivienda media y residencial, los cuales son solventados sobre todo por líneas de la banca de desarrollo como Sociedad Hipotecaria Federal; los desarrollos de playa son amparados gracias a la vasta diversificación de líneas de fondeo que obtiene de la banca, recursos de sus inversionistas, entre otros fondeos, permitiéndole soportar un nicho que la mayoría de las Sofomes actualmente no pueden satisfacer.
Para el 2023, la sociedad financiera prospecta una colocación de mil 500 millones en este nuevo nicho de mercado y abrir negocios en Puerto Vallarta, Playa del Carmen, Tulum, San José del Cabo, Cabo San Lucas y La Paz.
“La inflación ha generado un encarecimiento de materiales impulsando un incremento en el precio por metro cuadrado de la vivienda. No obstante, la plusvalía que ofrece una inversión inmobiliaria, se mantiene muy atractiva con hipotecas en el mercado que inician en 8.0% a tasa fija, a lo que se suma la perspectiva actual del peso como una moneda fuerte contra el dólar, destacando que en algunos destinos de playa las compras y posteriores rentas de los inmuebles se pactan en dólares”, señaló José Luis González, director de Crédito Puente de la empresa.
Se puede encontrar en la oferta que hoy existe en el mercado nacional, destinos de interés como Mazatlán, el cual ha tenido un boom inmobiliario gracias a la apertura de la autopista Durango – Mazatlán, la renovación de su malecón y centro histórico. Impulsando áreas de la plaza como Zona Dorada, Malecón, Cerritos y Holas Altas. En este destino también se observa un crecimiento de vivienda estimulado por un nuevo centro aeroespacial, una boyante industria procesadora de atún y atractivos como un nuevo acuario y un nuevo estadio de fútbol.
Otros destinos de interés son Los Cabos y La Paz, que han sido influenciados por el mercado americano que busca una opción de playa que brinde alojamiento con mejor precio y prestaciones similares a las que se dan en California o Miami. En cambio, en Vallarta la comunidad premium LGBT ha demostrado mayor interés por el destino.
Más al sur del país está Tulum, con una demanda mixta del mercado nacional e internacional o Playa del Carmen, donde más del 80% de la demanda se finca en inversionistas nacionales.
La versatilidad que da un servicio a la medida, con una excelente asesoría y la oportunidad de acreditar no solo a personas morales o fideicomisos empresariales, sino también fideicomisos de administración y otros vehículos, así como un comité de expertos que finca sus aprobaciones en la experiencia de los desarrolladores y viabilidad del proyecto, abren una puerta para impulsar la obra en todos los destinos de playa que ofrece el país.
