Como parte de la realidad que se vive en México, el mercado de jóvenes es cada vez más importante, respondiendo a la situación demográfica del país, es por ello que en los últimos 10 o 15 años la edad media del demandante de crédito hipotecario ha pasado de 43 a 44 años, a alrededor de 35, respondiendo a la realidad de un país joven.
Otro importante dato es la participación de género, porque es creciente la participación de la mujer. En el caso de la institución, en más de la mitad de los créditos del banco interviene una mujer y lo más relevante es que uno de cada tres es de una mujer sola.
Nuestro objetivo es poner al cliente al centro y que tenga el producto hipotecario adecuado, evaluar qué es lo que necesita, qué le conviene más a su necesidad, porque al final es una relación de largo plazo entre el banco y el cliente. Queremos acompañarlo, asesorarlo y apoyarlo en lo que necesita.
Con una buena asesoría podemos identificar cuál es el financiamiento al que podemos acceder y hacer los comparativos necesarios para tomar la mejor decisión.
Como parte de la innovación de la institución y de las iniciativas globales de Banco Santander, nuestro más reciente lanzamiento fue Hipoteca Verde, que en una primera etapa está dirigida a vivienda nueva.