Con el ingreso de México como miembro de la Federación Internacional de Lechería (FIL), el país se beneficiará de ser parte de una red dinámica de expertos y líderes que desarrollan el sector lácteo a nivel mundial.
Entre las actividades de la FIL está promover políticas, vínculos, asociaciones, capacitación y que se desarrollen las mejores prácticas dentro del sector lácteo a nivel mundial.
La FIL cuenta con más de 1200 expertos de 39 países y proporciona un mecanismo para que el sector lácteo alcance un consenso mundial sobre cómo ayudar a alimentar al mundo con productos lácteos seguros y sostenibles.
Como organización líder en la tecnología láctea, tiene un papel importante para garantizar que se implementen las políticas, normas, prácticas y regulaciones adecuadas para lograr este objetivo.
México se beneficiará de rápido acceso a todas las publicaciones y datos de la FIL, establecerá contactos con expertos mundiales en productos lácteos, que contribuirán a la construcción de respuestas y posturas conjuntas dirigidas a organizaciones intergubernamentales.
“Estamos muy emocionados de dar la bienvenida a México a la FIL. Esperamos trabajar con ellos en los problemas clave que enfrenta el sector lácteo mundial en la actualidad. La experiencia y la perspectiva de México no solo serán valiosas para el sector lácteo mundial, sino que tener a este nuevo país en la mesa junto con los demás miembros es increíblemente importante, lo que agrega aún más a la experiencia global”, destacó Piercristiano Brazzale, presidente de la FIL.
Finalmente, Caroline Emond, directora general de la FIL dijo que con la reciente incorporación de México como nuevo miembro, la FIL ahora representa más del 75% del suministro de leche del mundo. La FIL tiene su sede en Dinamarca.
Hasta junio, Mexico era uno de los 16 principales productores de leche en el mundo, sin embargo, solo representa el 2%, por debajo del 22% que registra la India, el mayor productor global.
Los mexicanos consumen en promedio hasta 130 litros de leche, incluyendo derivados, por persona al año, no obstante, la FAO recomienda consumir 180 litros.