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Se espera que el aumento del 40% en el precio del trigo impacte en la canasta de productos básicos en México.

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Antes de finalizar el 2022, los precios del trigo y los insumos que dependen de su fabricación tendrán un alza de doble dígito, lo que impactará de manera severa el bolsillo de los mexicanos.

Según el reporte 'Perspectivas de los mercados de productos básicos' que dio a conocer el Banco Mundial (BM), el alza en los precios internacionales del trigo va a ejercer presión sobre las economías que dependen del grano, en especial de Rusia y Ucrania, a causa de la invasión ordenada por Vladimir Putin.

 

El BM prevé que durante 2022 los precios del trigo presenten un alza superior al 40%, su máximo histórico, lo que detonará una carestía en gran cantidad de productos como el pan y los relacionados con los carbohidratos, a nivel mundial.  

 

Cabe mencionar que durante el 2021, México importó 32 mil toneladas de este grano desde Rusia y 192 mil desde Ucrania; ambas naciones concentran al menos un 29% de la producción mundial del trigo.

Relacionado a la crisis, la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa) señaló que durante el año pasado, la harina de trigo registró un incremento anual de 35 por ciento.

Incluso, antes de que estallara el conflicto en el Báltico, Carlos Otegui, expresidente de la Canainpa, pronosticó que el alza podría ser aún más drástica. En tanto, Ucrania reporta la pérdida de más del 30% de su cosecha anual de trigo por el tránsito de los ataques rusos.  

 

 

En este contexto, Grupo Bimbo, la panificadora mexicana más grande a nivel mundial, dijo que prevé realizar aumentos de precios este año, aunque se comprometió con el gobierno federal a mantenerlos estables al menos seis meses.

Al respecto, Juan Carlos Anaya, director general del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), comentó que la política del Ejecutivo para controlar precios es poco viable, a menos de que se apliquen subsidios al maíz y trigo.

En tanto, los comerciantes esperan un alza de entre uno y tres pesos en el pan de sal y de dulce, respectivamente. El consumo per cápita de pan de los mexicanos es de 33 kilos al año, esto lo hace el segundo tipo de carbohidrato predominante en su alimentación, según la Canainpa.

 

/Con información de El Heraldo de México/