En El Rosario, Sinaloa, el Presidente Andrés Manuel López Obrador y la presidenta electa Claudia Sheinbaum respaldaron al gobernador de la entidad Rubén Rocha Moya, en medio de la polémica por el caso de Ismael El Mayo Zambada y luego de que la Fiscalía General de la República desmintiera la investigación de la Fiscalía estatal sobre el asesinato de Héctor Melesio Cuén, ex rector de la Universidad de Sinaloa.
Durante el evento se contó con un dispositivo de seguridad que impidió que la gente se acercara a los gobernantes y funcionarios. Rubén Rocha dijo que en Sinaloa se gobierna con los principios del Presidente y el humanismo mexicano. "En Sinaloa gobernamos con integridad, con la honorabilidad que nos ha enseñado el Presidente AMLO, con la honradez y luchamos contra la corrupción, esos son nuestros valores y nuestros principios".
A su vez, en su discurso, el Presidente López Obrador señaló que el poder solo tiene virtud cuando se pone al servicio de la gente y dijo "fuchi" al poder por el poder. Aprovechó para enviarles un mensaje a sus adversarios y burlarse de ellos, pues anticipó que antes de irse les entregará un reconocimiento por su contribución a la llamada Cuarta Transformación y pidió un aplauso para ellos.
"No pasa nada, por eso agradecerles, y ahora antes de irme quiero dejarles un certificado a los principales adversarios, voy a escoger como a 10, no mucho, hay para más, pero se han portado bien. Un aplauso para los conservadores”.