El nearshoring no es solo una estrategia coyuntural, sino un cambio estructural en las dinámicas comerciales de América del Norte, especialmente en la relación con Asia. Este fenómeno, impulsado por decisiones geopolíticas, abre una ventana única para México, particularmente en su frontera norte, donde convergen oportunidades de inversión, comercio y desarrollo industrial.
Durante la conferencia “Hacia un nuevo enfoque de planeación en la frontera norte”, el Dr. Reyes Juárez del Ángel, presidente de FOA Consultores, destacó la relevancia de adoptar una visión integral para aprovechar este momento histórico.
Al respecto, Mauricio Jessurun Solomou, presidente del XL Consejo Directivo del CICM, señaló durante la presentación que, el fenómeno del nearshoring es una oportunidad única para revitalizar y transformar la frontera norte, ya que México se encuentra en una posición estratégica para capitalizar esta tendencia, especialmente en los estados fronterizos. “Este potencial no se concretará sin una planeación integral que considere las necesidades de infraestructura compartida y complementaria con Estados Unidos”, indicó.
Una frontera estratégica
La frontera norte de México, compartida con Estados Unidos, abarca 10 estados y más de 100 millones de habitantes. En las últimas dos décadas, 23 ciudades en esta región han expandido su superficie en mil hectáreas, reflejo del dinamismo económico y demográfico. Este crecimiento demanda una infraestructura moderna y sostenible para soportar la llegada de empresas y trabajadores.
Acciones necesarias
Para capitalizar el nearshoring, es esencial implementar una planeación integral. Entre las propuestas del Dr. Juárez destacan:
- Planes metropolitanos inteligentes: Desarrollar estrategias de ordenamiento territorial, movilidad sostenible y normatividad de urbanización en las principales zonas fronterizas.
- Infraestructura logística: Ampliar cruces fronterizos, modernizar corredores multimodales, fortalecer puertos marítimos y construir plataformas logísticas nacionales, incluyendo el Corredor Interoceánico.
- Adaptación tecnológica binacional: Acelerar la adopción de tecnologías compatibles entre ambos países.
- Coordinación binacional: Crear una comisión intersecretarial que fomente la rearticulación regional y atraiga inversiones estratégicas.
Una visión compartida
Y agregó que el momento para actuar es ahora. Transformar la frontera norte no solo es una necesidad estratégica, sino una oportunidad para consolidar a México como un actor clave en el comercio mundial y la reconfiguración de las cadenas de suministro.