En un esfuerzo por mejorar la sostenibilidad y reducir su huella de carbono, los Fideicomisos de Inversión en Bienes Raíces (Fibras) han incrementado su consumo de energías renovables.

Según un reciente informe de la Asociación Mexicana de Fibras, el porcentaje promedio de energía renovable utilizado por estas entidades pasó del 16% en 2022 a un 21.7% en 2023, reflejando un compromiso creciente hacia la transición energética.

Dicho aumento de 5.7 puntos porcentuales se enmarca dentro de las políticas ambientales que buscan cumplir con las metas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, así como fomentar el uso responsable y eficiente de los recursos.

La tendencia de las Fibras hacia la adopción de energías renovables también se refleja en sus esfuerzos por obtener distintas certificaciones ambientales, tales como LEED (Leadership in Energy and Environmental Design) que garantizan la eficiencia energética y el bajo impacto ecológico de sus inmuebles.

Estas figuras de inversión, que se dedican a administrar y rentar propiedades comerciales, industriales y de oficinas, han estado incorporando tecnologías más limpias y sostenibles en sus operaciones, tales como paneles solares, sistemas de eficiencia energética y el uso de energía eólica.

Tan solo, “en la última década, la sostenibilidad en la agenda de las organizaciones ha cobrado un nivel de relevancia significativo para los inversionistas y el resto de la cadena de valor; se busca más proactividad y transparencia en la materia”, indicó la Amefibra en un comunicado.

Fibras tienen más de 7 millones de m² certificados ambientalmente: AMEFIBRA

Destacó que el 93% de las Fibras emiten informes en materia ASG y el 100% participan activamente en el reporte a nivel sectorial.

Añadió que “en los últimos años, los temas Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG), han alcanzado un papel central en la estrategia de las organizaciones, ante un incremento en las expectativas de los diferentes grupos de interés”.