Este año, el peso mexicano ha mostrado una apreciación significativa frente al dólar, impulsada por el crecimiento en las exportaciones, remesas y la inversión extranjera.
De acuerdo con Banxico, se espera que el dólar cotice entre los 17.68 y los 18.67 pesos por unidad en 2024, a pesar de la fuerte pérdida de la moneda en junio. Este pronóstico es conservador, considerando que el peso superó las previsiones de 2023 con 17 pesos por unidad, algo que no se veía desde hace ocho años. Además, se prevé una inflación del 4.02% este año, contrastando con un crecimiento económico del 2.29 por ciento.
Bajas tasas de interés
Hugo Blum, CEO y fundador de 100 Ladrillos, destaca que la reducción de la tasa de interés tiene varios efectos económicos aprovechables:
- Reducción en el costo de endeudamiento: Los préstamos se vuelven más atractivos, fomentando el consumo.
- Menor atractivo para los ahorradores: Los rendimientos de las inversiones disminuyen, desincentivando el ahorro.
- Estímulo a la inversión empresarial: Las empresas encuentran un entorno favorable para financiar sus operaciones.
- Impulso al crecimiento económico: El aumento del consumo e inversión puede llevar a un crecimiento económico robusto.
Aprovechar el súper peso
La fortaleza del peso frente al dólar abre oportunidades únicas para los inversionistas mexicanos. Blum sugiere algunas estrategias para aprovechar esta situación:
- Diversificación Internacional: Con un peso fuerte, los inversionistas pueden diversificar sus carteras hacia activos en otras monedas, como acciones internacionales y fondos de inversión globales.
- Inversiones en el Mercado de Divisas: Los inversionistas sofisticados pueden participar en el mercado de divisas para aprovechar las fluctuaciones de las tasas de cambio, aunque requiere un sólido conocimiento del mercado y una gestión de riesgos cuidadosa.
- Adquisición de Bienes Extranjeros: La fortaleza del peso puede hacer que la compra de propiedades o bienes de lujo en el extranjero sea más asequible.