La profundidad de la recesión económica de México en 2020 será de entre -7.2 y -12%, de acuerdo con analistas consultados, lo que determinará una pérdida de 800 mil a 1.2 millones de fuentes de empleo formales. Sin embargo, y a pesar de que no hay crisis financiera, el mayor riesgo es que la recuperación sea muy lenta por la falta de una política fiscal contracíclica.